Eclipse total de Sol
2 de julio del 2019

 “Eso que veo es un adelanto de la Gracia celestial, ¿Por qué creo que hay más para realizar? Si entré en Él-Todo que es... Yo soy lo que Él es, no hay más”
+ MEM om – epigrama 761 La vía del agua 3


Introducción

Queridos lectores, un eclipse total no se puede dejar pasar. No voy a volver a explicar que es un eclipse, creo que eso ya lo saben.

Les dejo a modo gráfico un esquema del eclipse y los nodos lunares



El eclipse total

El día 2 de julio a las 15:23 hora de Argentina (12:23 UTC) se iniciará el eclipse de solar que encontrará su plenitud entre las 16:38 y las 16:41 hs.

Este eclipse es la trompeta que anuncia un nuevo ciclo. Se abre un periodo de transición y cambio hacia el 2 de diciembre hasta donde perdurará su efecto con la salida de Júpiter de manera definitiva de Sagitario. Este efecto se sumará al del solsticio (ver artículo anterior).

Los Aspectos y el mapa celestial

El eclipse se dará bajo el signo de Cáncer en la casa séptima en coincidencia con el eje nodal y en oposición a Saturno y Plutón en Capricornio (en casa II -2-). 

El ascendente del eclipse es en Sagitario por ende en casa I (1) en cuadratura a Neptuno y en conjunción al Punto de Fortuna. Este Neptuno comparte la casa 4 con Quirón y la luna negra.

Con Palas (y Eris) en cuadratura al eje nodal, al eclipse y al combo en Capricornio. Con una oposición muy marcada a Quirón.

Urano (casa 5) está en cuadratura con Marte y Mercurio (casa 8).




Los signos cardinales

Los signos cardinales son aquellos cuyo inicio coincide con un equinoccio o un solsticio: Aries, Cáncer, Libra y Capricornio. Son Signos que encabezan los cambios aunque les cuestan mucho las conclusiones.

Estos signos nos darán la clave para entender el eclipse.

Desde el 2008 Plutón entró en Capricornio, esta energía influye en los cuatro signos cardinales exigiéndoles cortar con las ataduras o mandatos de su historia y llevándolos a exponer su psique al mundo como medio de superación (exposición que aborrecen visceralmente). Muchos de sus prejuicios se basan en traumas de su pasado, despojarse de ese lastre es la clave válida desde el 2008 y lo será hasta enero del 2024. Esta energía se ve potenciada por el ingreso de Saturno al mismo Capricornio a fines del 2017.

Nada es lo que parece

Este eclipse mantiene su naturaleza de portal abismal pero también posee un doble filo. Por un lado el filo abismal y por otro el que viene a cortar con una energía bastante negativa que viene del último equinoccio. 

La familia de origen se hace presente trayendo desafíos en relación a un pasado olvidado o que se quiere olvidar. Esta imposición traerá una gran incomodidad como base pudiéndose hasta manifestar una enfermedad corporal, psíquica o espiritual. El núcleo de la misma nos revelará la forma de superarla y así poder superponerse a los dolores del pasado. Transmutar ese sufrimiento nos llevará a una nueva profundidad de la vida espiritual.

Por un lado Cáncer intentará tironear a la persona para que se quede en un lugar seguro y en lo posible confortable. Pero Capricornio que se halla del otro lado de la soga previene sobre la piedra en el camino e insiste en superarla.

Cambios y movilizaciones con Sagitario y Júpiter en el ascendente. Expansión y proyección espacio temporal. Nuevos horizontes y la gran promesa de un renacer del dolor.

Este tironeo hará sufrir a las naciones y los dolores del mundo se intensificarán. En su interior el hombre vivirá esas repercusiones como puede.

Hay basura en nuestro interior tapando el tesoro que allí anida. Este abismo eclipsíaco realza a ambos. El humano y la naturaleza se debaten entre dos fuerzas: el orden vivificante y la onírica visión de un ego que busca satisfacerse en la comodidad de su zona de confort.

Signo por signo

ARIES: Vivirá intensamente el tironeo entre lo público y lo privado. Buscará definir nuevas metas y objetivos en su vida.

TAURO: En los desplazamientos encontrarán la posibilidad de superación. Tanto los geográficos (viajes) como los internos.

GÉMINIS: Vivirá un momento confuso, muy intenso aún para su confusa naturaleza. Lo material traerá incertidumbre. No es época para una doble moral.

CÁNCER: periodo de altísima tensión con el afuera. Escuchen, no juzguen, no hablen. Saturno les indica un gran ascetismo. Bastante hemos detallado anteriormente la situación de los cangrejos.

LEO: Momento de introyección. La búsqueda de empatizar con el otro es fundamental ya que las actitudes de los leones y leonas son muy agresivas para los demás. No se agoten sepan descansar.

VIRGO: Se sentirán con mucha energía, se acelerarán y buscarán ser reconocidos. Muy buenas oportunidades laborales si las saben aprovechar. No es época propicia para innovar en la pareja.

LIBRA: Periodo de gran tensión. El crecimiento en los estudios y la profundización del saber les traerá grandes beneficios.

ESCORPIO: Algo de claridad mental en medio de tanta neblina psíquica. Verán el mundo que los rodea sin filtro. Su propio veneno los amargará ante tanta realidad. Cuiden lo laboral ya que será fuente de inseguridad hasta el 2 de diciembre. No tomen decisiones apresuradas.

SAGITARIO: Pleno y radiante puede pecar de exceso de seguridad y confianza. Puede desatender el hogar y al frente interno. El mundo lo aclamará. Serán las palmas que anteceden al martirio que los espera en el 2020. Cuídense el 2 y el 16 de julio. El expansionismo sagitariano se verá normado por un muy saturnal Capricornio con lo que su Júpiter tronará.

CAPRICORNIO: Ceder y tolerar. Aceptar lo imperfecto e incompleto. Grandes desafíos para los caprinos que quieren dirigir la situación de una orquesta que aún desafina. La tensión de este eclipse se irá incrementando hasta el día 16 de julio donde otro eclipse colmará la copa.

ACUARIO: no tolerarán depender de nadie y que nadie dependa de ellos. La vida social les pide muchos cambios a nivel psicológico a fin de empatizar con el medio. Momento ideal para comenzar a cuidar la salud con alguna acción por mínima que sea. No es época apara derrochar.

PISCIS: estarán dispersos en muchas cuestiones sociales y particulares. Lo ideal sería plantarse bien con los pies sobre la tierra y discernir que se puede y que no. La omnipotencia será su peor enemigo

La brecha entre eclipses

Hoy nos enfrentamos a un eclipse, el 16 de julio habrá otro aún más distorsivo y abismal. El periodo entre eclipses mantendrá viva y potente a esa tensión de la que venimos hablando. Esperemos a la suave templanza de la primavera que nos traerá un ligero alivio frente al año que nos queda por venir.

Gabo Abad . Astrólogo y Futurista