25 y 26 de agosto de 2020
El noveno paso
La Luna de la alegre tontera






La introducción

Sagitario es un signo de fuego, solar, mutable, expansivo, visionario, polifacético y muy constante. Este signo engendra gente con gran gusto por el conocimiento y por los placeres. Por ello, sus pecados asociados suelen ser la gula y la lujuria.


Los Cielos

La Luna creciente en Sagitario nos otorga una semana de cierta mejora en la salud en sentido amplio, sobre todo en lo anímico. Su regente Júpiter sigue bajo arresto en Capricornio por ello la asistencia maternal de la Luna será bien recibida por los nativos de Sagitario.

Los Nodos lunares siguen en la dupla Sagitario-Géminis señalan el rumbo a seguir y mantienen a raya a la neurosis generalizadas. Hay un horizonte claro por primera vez en mucho tiempo y si bien la salida será más clara después del próximo equinoccio, ya se vislumbra una meta a alcanzar.

La luna negra que viene parasitando a Marte hace rato (gran problema para Aries y Escorpio), ahora ha sumado a “el Punto de Fortuna” a sus víctimas trayendo a la conciencia historias de padres y madres, sus pérdidas, tristezas, ausencias y la falta de cariño. La sangre, la familia, el origen y el dolor que generaron se impondrán a todo aquel que en debilidad se compadezca por su presente. 


La Luna sagitariana

Es una Luna que tiende a intelectualizar lo que siente por ello engendra a religiosos y filósofos. Es una Luna que entiende lo que se necesita para la travesía, aunque no siempre tenga los elementos para realizarla. 

Bajo la tutela de Saturno, que rige el año, se hallarán esos materiales para que esta luna teja su magia y así hacer viable esa gesta que parecía imposible. 

Es una Luna que buscará el buen dormir y mejor soñar. Desarrollará ciertos placeres nocturnos que serán inolvidables.
Todos tendremos un momento íntimo de tregua en medio del pandemónium que se desatará esta semana, en especial para los atormentados sagitarianos.


Conclusión

La Rabí del fin del mundo dijo una vez: “Dios preserve esa tontuela felicidad sagitariana”. 
Pequeñas alegrías en medio de la locura y el encierro, eso es lo que nos trae esta luna centáurea. Es cierto que se corre el riesgo de excederse en esos placeres que Sagitario tanto promueve pero bajo el yugo de Saturno seguramente no llegarán a desmadrarse.
 
El arquero cósmico siempre apunta  a lo alto, a ese horizonte próximo que trae la felicidad. Los invito a no pensar en lo que fue o en lo que será sino a disfrutar de estas pequeñas tonterías que llenan el alma de alegría, en ocasiones mínimas y efímeras y en otros momentos perdurables e inolvidables.

Relajemos y dejémonos encantar por la azulina luz de la Luna de Sagitario. 


Gabo Abad. Astrólogo y Futurista.